TipResumen

Varios detalles me decantan por la victoria sueca. Es una selección en clara curva ascendente y con hambre. No han hecho mala preparación y tiene un bloque joven e interesante, y sus veteranos son, claramente, segunda línea. Bosnia, en cambio, está en proceso de recambio. Aún no consiguió hacer funcionar como bloque a sus hombres más prometedores.




Supongo que por una cuestión de localía se paga tanto Bulgaria. Es mejor equipo, con mejores jugadores, con más ritmo y, sobre todo, más puntería. Destaca el jugador del Barcelona Aleksandar Vezenkov, pero tiene un base típicamente norteamericano, Dee Bost, del Zalgiris Kaunas, capaz de cambiar de ritmo, algo que puede hacer mucho daño en los 1x1. Una selección muy superior con una línea, a mi entender, muy corta.




Macedonia es otra de esas selecciones que, en condiciones normales y sin sobresaltos, debería ganar su grupo. Es un equipo con jugadores que tiene roce en diferentes competiciones europeas. Su máximo referente es Vojdan Stojanovski, ex jugador de Andorra y Betis en ACB, que esta temporada militará en la liga turca. Jugó en aquella selección que maravilló a todos en 2011 (semifinales de Eurobasket) y participó en mil batallas. El base de esa selección es un norteamericano que juega en el Milano italiano, Jordan Theodore. Son los referentes de una selección muy potente. Enfrente una de las incógnitas del torneo. Al igual que en el fútbol, Kosovo ha repescado jugadores con orígentes familiares kosovares. Su estrella es Dardan Berisha, que jugará en Caserta de la Lega este año. Por potencial, la victoria de Macedonia parece clara. Aún así, habrá que estar atento a lo que puede hacer Kosovo en su casa.